Interesantes recomendaciones para visitar a un recién nacido. Nuestros familiares y amigos han sido con nosotros muy respetuosos, y es que ya éramos casi de los últimos en traer niños a este mundo: siempre llamaban antes de venir y si no teníamos ánimo o estábamos cansados, lo decíamos sin tapujos sabiendo que al otro lado había siempre personas comprensibles. Sin embargo, nosotros antes de ser papás nos saltamos muchas de estas recomendaciones a la torera porque no éramos conscientes de la importancia que tienen. Por eso nos resulta fundamental tenerlas presentes, para quien -como nosotros- no se las haya planteado antes de ser papás. Os las comentamos al final y añadimos algunas propias:

Imagen: Dr. Armando Carvajal
Consejos
- Avisar antes de ir por si los padres están muy cansados o simplemente, no les viene bien y prefieren otro momento.
- El tema de los consejos está muy bien si se los piden. Para no ser un cansino/a, no comente a cada rato cómo lo hizo usted o cómo lo haría ahora porque cree que la suya es la mejor forma. Igual estos papis primerizos (o no) se equivocan… ¿y qué? Déjeles criar a su manera, con sus aciertos y sus errores. De todo se aprende.
- Deje al bebé tranquilo si está dormido: no lo toque, no lo moleste, fotos sin flash y con consentimiento parterno. ¡Las horas de sueño se valoran tanto!
- Si usted está enfermo, aunque sea un simple resfriado, quédese en casa. Su simple resfriado puede tener consecuencias muy feas para el bebé: tosferina, bronquiolitis,… y siendo tan pequeños es innecesario correr riesgos. Incluso hay iniciativas que diseñan carteles de «No tocar» al bebé: Se mira pero no se toca.
- Tampoco bese al bebé, evitaremos la transmisión de enfermedades como virus, herpes, etc.
- No le toque las manitas. Ellos se las llevan continuamente a la boca y puede que usted no las tenga completamente limpias.
- Si puede evitar fumar antes de entrar a ver al bebé y a su mamá, hágalo. Huele realmente mal. A veces es agobiante.
- Si puede dar los regalos una vez ya en casa y no en el hospital, ¡es una carga menos! Los papás se van realmente cargados del hospital 😀
- Si va al hospital, visitas cortitas.
- Si va a visitar a un bebé ya en casa, lleve algo de comer, los papás agradecen los tuppers o fiambreras más que nada en este mundo. Les ahorra tiempo y lo ganan para poder descansar
- Por lo general no se hace, pero si se puede, vamos a evitar los comentarios de la cara de cansancio de los papis o cosas del tipo «¿pero te han sacado ya al niño? ¡tienes todavía barriga!». Esto sí lo hemos sufrido. En nuestro caso venía por parte de amigos que creían hacer una broma. NO es una broma y NO hace gracia. Mi cuerpo ha cambiado para traer al mundo a un bebé. Es una revolución de emociones: lo bestia, lo emocionante y lo bonito de la vida. Y miedo. Miedo a no saber si lo haremos bien, a esperar a que el dolor pase, a levantarte ciertos días que no sabes con qué pie comienzas ni con qué pie terminas y ni tú entiendes el estado de ánimo en el que estás. Miedo a comenzar una nueva vida que irremediablemente cambia (y no a peor, como mucha gente cree). Miedo a mirarnos a veces en el espejo y no saber quiénes somos. Mi cuerpo ya no será el que era, tengo que aprender a querer este nuevo cuerpo, aprender a querer mis estrías, mis cicatrices y mis pechos, que cuando pase la lactancia caerán irremediablemente,… Así que desde aquí, antes de pensar que hacéis una broma, un poco de respeto ❤