Este potaje tiene un aire a casa de abuelos almerienses y murcianos que nos encanta. Es un plato que seguimos cocinando dos generaciones después y disfrutando a la mesa con l@s nuestr@s. Os dejo la receta tal y como la hacía mi abuela (y que si viera su nombre escrito, algún pellizquillo me llevaba), aunque la hemos ido variando de década en década…

Ingredientes para 4 personas
- 400 gr de garbanzos
- 1 litro de agua o caldo
- 1 zanahoria
- 2 cebollas
- 1 cabeza de ajos
- 1 tomate
- Pimentón y Sal
- Hebras de azafrán
- 2 rebanadas de pan
- Perejil
- 1 huevo
- 200 gr de acelgas
- 4 patatas de tamaño mediano
Preparación
- Dejar los 400 gramos de garbanzos a remojo la noche antes de cocinarlos (12 horas aproximadamente).
- En una olla, calentamos el litro de agua (o el caldo), los garbanzos, una cabeza de ajos (excepto 2 dientes que usaremos después), 1 cebolla entera y 1 zanahoria entera. Lo dejaremos cocer todo 1 hora y media.
- Mientras tanto, prepararemos un sofrito calentando aceite de oliva en una sartén. Una vez caliente, tostaremos 1 diente de ajo muy picado. Agregaremos 1 cebolla también muy picadita y una vez que se poche (se ponga trasparente), le añadiremos 1 cucharadita de pimentón y 1 tomate rallado. Rehogamos bien. Y reservamos.
- Paralelamente, freiremos en aceite de oliva bien caliente 2 rebanadas de pan. Nosotras últimamente lo que hacemos es tostarlas en el tostador y evitamos el paso del frito.
- En un mortero, majaremos 1 diente de ajo y perejil fresco. Añadiremos las dos tostadas de pan y un huevo duro partidos en trocitos. Y majamos todo de nuevo hasta que quede bien triturado.
- Añadimos dicho majado y el sofrito anteriormente reservado a la olla de los garbanzos.
- Por último, añadiremos las acelgas y las patatas partidas en cascotes para favorecer que la patata suelte el almidón (leer este post donde Karlos Arguiñano enseña a partir las patatas dependiendo del uso que queramos darles). Dejamos cocer durante unos 20 minutos (para comprobar que la patata está hecha, podemos pinchar un cuchillo, y si éste entra fácilmente, están en su punto). Si optáis por garbanzos de bote, éste es el momento de añadirlos.
- Para que el caldo del potaje espese, batimos o pasamos por el pasapuré la zanahoria y la cebolla que cocimos junto a los garbanzos al principio y las volvemos a incorporar a la olla.
- Apartamos los ajos enteros.
- ¡Servimos y disfrutamos!
